La irrupción de la pandemia ha supuesto un vuelco total a nuestros cimientos como sociedad al poner en jaque la estructura económica, educativa, política, sanitaria y de transporte, un sector que también ha sido duramente golpeado por los efectos derivados del coronavirus.
A lo largo del pasado ejercicio 2020 en Metrotenerife nos hemos readaptado de modo vertiginoso a esas nuevas condiciones, lo que también nos ha permitido reforzar nuestra función de servicio público para quienes debían salvaguardar los servicios y actividades empresariales esenciales durante el confinamiento y la desescalada. Siempre estuvimos convencidos que el tranvía tenía que seguir circulando y es por ello que mantuvimos la estructura de costes y la oferta de transporte, a pesar de que las cifras de demanda eran insuficientes para la rentabilidad del propio servicio y que causaría una importante merma en la facturación de la compañía. Esperamos contar con la colaboración del Estado y de la Comunidad Autónoma de Canarias para sufragar el déficit generado por una circunstancia sobrevenida y extraordinaria como ha sido la pandemia.